Es una organización 501(c)4 de gays que lucha contra la sexualización, indoctrinamiento y medicalización de los niños bajo el disfraz de “LGBTQIA+”

Para los interesados, pueden encontrar su cuenta en Twitter: https://twitter.com/againstgrmrs

27JUN2023

¿Quién quiere una lección de historia? Mientras reflexionamos sobre la historia gay este mes de junio, nos gustaría recordarles a todos que estos son algunos de los “íconos” adorados por el culto moderno LGBTQ+ que nos negamos a reconocer como héroes:

Robert Hogge, también conocido como Mónica Helms, diseñó la primera bandera trans en 1999 utilizando el mismo esquema de colores que se ve en los símbolos que se encuentran en los sitios web a favor de la pedofilia. Hogge ha escrito varias novelas bajo el nombre Helms en las que describe su autoginefilia o excitación sexual al usar ropa de mujer.

Confesó haber robado ropa interior de mujeres, incluidas las de su propia madre y pasó a escribir fantasías eróticas sobre su fetiche. En una historia de su novela “cuentos de una mente de dos géneros”, Hogge/Helms escribió una historia que sexualizaba a una “mujer mágica” que lucía permanentemente como una adolescente.

Y no hablemos de John Money, quien acuñó el término “identidad de género” y se opuso a la clasificación de la pedofilia como un fetiche anormal, afirmando: “Si yo fuera a ver… a un niño de diez u once años que siente una atracción erótica intensa hacia un hombre… si la relación es mutua, no la llamaría patológica”.

Luego está Volkmar Sigusch, quien acuñó el término “cisgénero” que ahora se usa tan negativamente que Elon Musk ha declarado que el término es un insulto. Sigusch dijo una vez: “No hay nada de malo con la pedofilia en el sentido de la palabra, es decir, en contra de gustar, incluso amar, a los niños. La sensualidad que se desarrolla entre un niño y un adulto es algo maravilloso”.

El activista trans indio Alok Vaid-Menon ha intentado convencer al público de que “las niñas pequeñas también son sexys”. Podemos ignorar la inconformidad de género, pero definitivamente eso no…

Ninguno de estos pervertidos ha tenido algo que ver con los derechos de los homosexuales. No queremos tener nada que ver con ellos. Muchos otros de los así llamados “activistas de los derechos de las personas trans” continúan con el legado de sus antepasados pedófilos como John Money al insistir en que los niños son seres sexuales que deberían tomar bloqueadores de la pubertad para evitar su desarrollo, algo que podría lograr que se vean como niños para siempre.

¿Coincidencia? No lo creemos.


Fuente:

Por Ileana

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