Reportado por el New York Post:
China ha abierto docenas de “estaciones de servicio de policía en el extranjero” en todo el mundo para monitorear a sus ciudadanos que viven en otros países, incluida una oficina en la ciudad de Nueva York y tres en Toronto.
“Estas operaciones evitan la cooperación bilateral policial y judicial oficial y violan el estado de derecho internacional, y pueden violar la integridad territorial en terceros países involucrados con el establecimiento de un mecanismo policial paralelo utilizando métodos ilegales”, según se lee en un informe de Safeguard Defenders, una organización de vigilancia de derechos humanos, lanzado a principios de este mes.
El informe, titulado “110 en el extranjero: la policía transnacional china se volvió loca”, detalla los extensos esfuerzos de China para combatir el “fraude” por parte de sus ciudadanos que viven en el extranjero, en parte mediante la apertura de varias estaciones de policía en los cinco continentes que han ayudado a las autoridades chinas en “llevar a cabo operaciones policiales” en suelo extranjero”.
Europa alberga la mayoría de las estaciones de policía, con ubicaciones repartidas por todo el continente en lugares como Londres, Ámsterdam, Praga, Budapest, Atenas, París, Madrid y Frankfurt. América del Norte también alberga cuatro de las estaciones, con tres oficinas en Toronto y una en la ciudad de Nueva York. En total, hay 54 estaciones de este tipo en 30 países diferentes.
Fuente y más datos (inglés):