11NOV2012
Lo siguiente es de un artículo titulado “GOING UNDERGROUND” (yendo bajo tierra), escrito por la secuestrada Christa Tilton, una atractiva mujer rubia o de “apariencia nórdica” que relata algunas experiencias notables de contacto y secuestro que ha tenido en la base Dulce. Christa tuvo la amabilidad de tomarse el tiempo para contribuir con sus propias y fascinantes experiencias a este trabajo y responder a varias de mis preguntas para que otros secuestrados como ella, pudieran comprender mejor sus propios encuentros confusos con secuestradores extraterrestres o incluso con instalaciones subterráneas:
“Hace varios meses me enteré de dos casos diferentes, uno en mayo de 1973 en el que Judy Doraty de Texas tuvo una experiencia inusual en la que pudo haber sido llevada a una instalación subterránea; también un caso de secuestro investigado por APRO y el Sr. Paul Bennewitz en el que en mayo de 1980 Myrna Hansen de Nuevo México tuvo una experiencia similar en la que fue llevada a algún tipo de instalación subterránea.
“Ya que estoy investigando mi propia experiencia subterránea, descubrí que para ser de ayuda para mí o para cualquier otra persona que pudiera haber experimentado algo similar, iba a tener que obligarme a leer sus transcripciones. Durante meses lo postergué porque supongo que, inconscientemente, realmente no quería revivir esa experiencia que tuve, leyendo sobre las experiencias de otras personas. Ahora me alegro de haberlo hecho. Finalmente voy a revelar algunas de las muchas correlaciones de nuestros tres casos con la esperanza de que otros presenten más información.
“Mi experiencia sucedió en julio de 1987. Tuve unas tres horas de ‘tiempo perdido‘ en las que más tarde, bajo hipnosis, reviví la noche más inusual de mi vida… No fui voluntariamente a la nave. Dos pequeños extraterrestres me arrastraron poniendo mis dos brazos en mi espalda hasta la nave después de que me dejaran inconsciente. Lo siguiente que recuerdo es despertar en una mesa dentro de algún tipo de nave pequeña.
Un “guía” me saludó y me dio algo de beber. Ahora creo que fue un estimulante de algún tipo porque no me dio sueño después de beber la substancia. Me sacaron de la nave y cuando miré a mi alrededor me di cuenta de que estaba parada en la cima de una colina. Estaba obscuro, pero vi una luz tenue cerca de una caverna. Caminamos hasta esa zona y fue entonces cuando vi a un hombre, vestido con un mameluco rojo tipo militar [como llevaría un piloto]. Mi guía parecía conocer a ese hombre porque lo saludó cuando nos acercábamos. También noté que usaba algún tipo de parche y portaba un arma automática.
Cuando entramos en el túnel, me di cuenta de que íbamos directamente, por dentro, por la ladera de una gran colina o montaña. Allí nos encontramos con otro guardia de rojo y luego vi un punto de control computarizado con dos cámaras a cada lado. A mi izquierda había un gran surco donde un pequeño vehículo de tránsito te llevaba más adentro. A mi derecha, parecía como un pasillo largo donde había muchas oficinas. Subimos al vehículo de tránsito y nos fuimos durante lo que pareció ser un tiempo muy largo a otra zona asegurada. Fue entonces cuando me dijeron que me subiera a algún tipo de dispositivo similar a una balanza frente a la pantalla de una computadora. Vi luces parpadeando y calculando números y luego se emitió una tarjeta con agujeros perforados. Más tarde me di cuenta de que se usaba como identificación en una computadora.
Le pregunté a mi guía adónde íbamos y por qué. No dijo mucho en todo ese tiempo, excepto que debía mostrarme algunas cosas que necesitaba saber para futuras referencias. Me dijo que acabábamos de ingresar al Primer Nivel de la “instalación”. Le pregunté qué tipo de instalación era y no respondió.
“Esta historia es muy larga y detallada y espero escribir más sobre ella, así que [solo] destacaré algunas de las cosas que vi… Me llevaron a un tipo de enorme ascensor que no tenía puerta. Era como un gran montaplatos. Nos llevó al Nivel Dos donde había dos guardias con un mameluco de diferente color y tuve que ir por un gran pasillo y vi muchas oficinas que tenían computadoras alineadas en la pared.
Mientras caminábamos, noté que la iluminación era extraña porque no podía ver una fuente para ella.
Pasaron otras personas y ni una sola vez actuaron como si yo fuera una extraña. Sentí que estaba en un enorme edificio de oficinas donde hay muchos empleados con muchas oficinas y cubículos. Luego vi un área extremadamente grande que parecía una fábrica gigante. Había una pequeña nave de tipo alienígena estacionada a un lado. Algunos estaban trabajando debajo y fue entonces cuando vi a mi primer alienígena de tipo gris. Parecían estar haciendo trabajos menores y ni una sola vez miraron hacia arriba cuando pasamos. Había cámaras colocadas por todas partes.
“Luego llegamos a otro ascensor y bajamos al Nivel Cinco. Fue entonces cuando sentí una sensación de miedo extremo y me resistí. Mi guía me explicó que mientras estuviera con él no me harían daño. Así que salimos y vi guardias apostados allí en el puesto de control. Esta vez no eran amistosos y estaban dando órdenes a diestra y siniestra. Noté que dos de los guardias parecían estar discutiendo sobre algo y seguían mirándome. Quería encontrar la salida más cercana, pero sabía que había llegado demasiado lejos para eso. Esta vez me pidieron que me cambiara de ropa.
Fuente:
https://thinkaboutit.site/underground/the-dulce-papers-chapter-25/
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